Los juegos que aparecen a continuación utilizan uno o varios de los cuadros resumen del Evangelio que se muestran al final de la página.
Los seis números de un dado ordinario pueden representar los cuatro Evangelios: Mateo como uno, Marcos como dos, Lucas como tres y Juan como cuatro. Además, cinco pueden representar los Evangelios Sinópticos (Mateo, Marcos y Lucas), y seis pueden representar los cuatro Evangelios.
El juego más sencillo consiste en que los jugadores, por turnos, tiren un dado y compartan el Evangelio o los Evangelios correspondientes, utilizando los cuadros sinópticos para encontrar pasajes que compartir. Por ejemplo, si alguien saca un cinco, ganará cinco puntos y se le pedirá que hable brevemente sobre algo de uno o quizás de los tres Sinópticos (Mateo, Marcos y Lucas). Si todos los miembros del grupo son adultos, la puntuación es, por supuesto, opcional.
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Para una versión más avanzada de este juego de tirar y compartir, los jugadores tiran dos o más dados encima de una impresión del Resumen de los Cuatro Evangelios colocada en posición horizontal sobre una mesa. Se ganan puntos cuando un número de dado apropiado cae encima de uno de los Evangelios del impreso. En el caso de Mateo, los valores adecuados serían 1 (para el primer Evangelio), 5 (para que Mateo sea uno de los Evangelios Sinópticos) o 6 (que apunta a cualquiera de los Evangelios). Para Marcos, los puntos se obtendrían por 2, 5 o 6. Para Lucas los números deberían ser 3, 5 ó 6. Para Juan, sólo 4 ó 6 serían números ganadores.
De nuevo se incluye la puesta en común, diciendo los jugadores algo así como: "Me gusta Mateo / Marcos / Lucas / Juan porque...".
Se puede comprar y utilizar un dado con 28 o 30 caras . Estos pueden señalar los números de los capítulos de los cuatro Evangelios. Así, si un jugador saca un DOS con un dado normal y un DIEZ con el dado especial más grande, el capítulo diez de Marcos (el segundo Evangelio) valdría diez puntos. Sin embargo, si la tirada ordinaria hubiera resultado un seis, el capítulo diez de los cuatro Evangelios estaría en juego, y la puntuación total de ese turno sería 40 (4X10). Por supuesto, si saliera un 30, no habría ningún capítulo indicado, ya que el capítulo más alto es el capítulo 28 de Mateo. Por lo tanto, la puntuación para ese turno sería cero. La concesión de puntos, una vez más, es opcional, ya que aprender a utilizar los cuadros sinópticos y compartir es más importante.
Los jugadores intentan adivinar en qué capítulo se encuentra el versículo que lee el líder del juego. Por ejemplo, si se lee Lucas 15:17, que trata del arrepentimiento del hijo pródigo, muchos reconocerán inmediatamente la historia, pero puede que no sepan en qué parte de los Evangelios se encuentra. Se conceden tres puntos por la respuesta correcta (capítulo 15 de Lucas) en la primera lectura, antes de poder utilizar un cuadro resumen de los cuatro Evangelios. Se conceden dos puntos por acertar el capítulo en la segunda lectura, cuando deben utilizarse los cuadros sinópticos, y un punto por la respuesta correcta en la tercera lectura, cuando se dan pistas adicionales.
En lugar de gritar en voz alta el capítulo y terminar rápidamente el juego para todos, cada participante debe escribir su respuesta después de cada lectura. Al final de cada ronda, después de la tercera lectura y de que se hayan dado varias pistas, el animador 1.) permite que los participantes compartan sus respuestas y pensamientos, 2.) da la respuesta correcta y 3.) lo más importante, enseña algunas verdades bíblicas clave basadas en el versículo que se ha leído y su contexto.
En una forma alternativa de este juego, los jugadores eligen por turnos un capítulo de los cuatro Evangelios y los demás intentan adivinar de qué capítulo se trata. Sin embargo, en lugar de dar pistas, los otros jugadores hacen preguntas de Sí / No para reducir las posibilidades. Se gana un punto por cada pregunta formulada. Es algo parecido al Golf de los Cuatro Evangelios.
Los participantes se dividen en equipos y cada uno recibe uno de los cuadros resumen de los Evangelios. En cada ronda, a un miembro del equipo se le da un capítulo de uno de los Evangelios que el otro miembro o miembros de su equipo deben adivinar. Como en el golf, el equipo ganador después de varias rondas será el que tenga el menor número de pistas dadas y de adivinanzas erróneas. Después de cada pista, hay que adivinar al menos una cosa.
Por ejemplo, el líder puede dar al equipo que da la pista el capítulo 21 de Lucas. Una buena primera pista para este capítulo sería: "Se trata del final de los tiempos". Un miembro del equipo podría entonces adivinar erróneamente el capítulo 24 de Mateo. A continuación, el dador de pistas probablemente debería decir: "Estoy en el Evangelio de Lucas". Entonces los miembros del equipo podrían adivinar fácilmente que la respuesta correcta es Lucas capítulo 21. Esta ronda daría como resultado cuatro puntos, como si fueran cuatro golpes de golf.
Los líderes del juego deben elegir capítulos sobre los que estén preparados para hablar después de que se dé la respuesta correcta. Además, normalmente los capítulos que hay que adivinar no deben ser demasiado fáciles. Por ejemplo, el capítulo 15 de Juan es fácil de adivinar, ya que es el único que trata de Jesús como la Vid Verdadera. Sería como un hoyo par dos en golf. Sin embargo, el capítulo seis de Marcos es más difícil, ya que el caminar de Jesús sobre el agua se encuentra en tres Evangelios y capítulos diferentes. Entonces sería como un hoyo par cuatro.
Cada pista es como un solo golpe en golf y no puede contener dos piezas de información. Por ejemplo, la siguiente frase -- "Este capítulo trata de una gran pesca y de la llamada de Mateo". -- contiene dos datos que harían que adivinar el capítulo cinco de Lucas fuera demasiado fácil. Sería como golpear la pelota dos veces en lugar de sólo una.
Cada participante recibe una copia de un cuadro resumen y, después de que el líder explique algunos aspectos básicos sobre los Evangelios, el juego podría comenzar con el líder gritando: "la resurrección de Lázaro". El primer miembro que se ponga en pie y empiece a leer un versículo adecuado ganaría tres puntos.
Si hay una gran diversidad de conocimientos bíblicos en el grupo, el líder puede igualar las cosas con pistas, por ejemplo diciendo: "Está en el Evangelio de Juan". Así, los principiantes tendrían muchas posibilidades de ganar o quedar en segundo o tercer lugar y ganar puntos.
PRECAUCIÓN: Un dirigente prudente tendrá cuidado de no dedicar más de cinco o diez minutos a disertar sobre el contenido de los Evangelios antes de empezar el juego. En su lugar, debe estar preparado para enseñar sobre los Evangelios mientras se juega, un poco aquí, un poco allá. También deben establecerse reglas sobre el uso de teléfonos inteligentes y tabletas antes de que comience el juego.
Estos gráficos son los que se centran en el HABLA DE JESÚS.
Estos gráficos son los que se centran en los MILAGROS DE JESÚS.
Hay varios cuadros resumen adicionales centrados en otros temas, como las mujeres, la creencia y la incredulidad, y las preguntas formuladas en la página de los Cuatro Evangelios. Los juegos anteriores también pueden utilizarse con estos gráficos.
